Agua nebulizada: ¿cómo funciona este sistema de extinción de Incendios?
El agua nebulizada es un sistema de protección contra incendios que se basa en la dispersión de partículas de agua muy pequeñas. Estas partículas serán las encargadas de controlar, sofocar y suprimir el incendio. Este sistema de extinción es uno de los más sencillos y efectivos que existen optimizando la utilización del agua.
¿Qué es el agua nebulizada?
Como ya hemos comentado, el agua nebulizada es un sistema de extinción de incendios mediante agua (UNE-CEN/TS 14972:2014). Su principal particularidad es que dispersa el agua en partículas muy pequeñas descargando una cantidad menor a la utilizada por los rociadores tradicionales.
Actúa mediante las siguientes acciones:
- El agua nebulizada logra enfriar tanto las llamas como los gases generados en la combustión.
- Logra reducir el calor radiante gracias a esas pequeñas partículas de agua descargadas.
- Desplaza el oxígeno por evaporación.
Además el uso de este sistema de extinción ofrece los siguientes beneficios ante un incendio:
- Rápida respuesta con una activación inmediata.
- Reduce los daños producidos por la utilización del agua.
- Es un sistema más respetuoso con el medio ambiente.
- Gran poder de actuación contra muchos tipos de incendio.
- Reduce casi a cero los peligros de toxicidad presentados por otros sistemas.
¿Cómo funciona?
La principal característica es la división de las gotas de agua en tamaños muy pequeños. Esto se consigue mediante una boquillas especialmente diseñas a presiones de hasta 200 bares. La dispersión del agua nebulizada se basa en tres mecanismos para su lucha contra incendios:
- Enfriamiento: Las pequeñas partículas de agua, en contacto con las llamas, se evaporan absorbiendo una gran cantidad de calor. El vapor de agua tiene una gran capacidad calorífica, por lo que al entrar en contacto con el fuego, logra enfriarlo.
- Sofocación: Este tipo de agua logra evaporarse rápidamente en contacto con las llamas y por las temperaturas. De esta forma se consigue que la concentración de oxígeno se reduzca drásticamente. Cuánto mayor sea la cantidad de vapor de agua y mayor sea el incendio, la reducción de oxígeno logrará la sofocación.
- Atenuación: La dispersión del agua generará una gran niebla en el espacio en el que se encuentre el incendio. Esta neblina logrará absober gran parte del calor radiado por el fuego protegiendo así los materiales u objetos cercanos.
Aplicaciones del agua nebulizada
Este tipo de sistemas de protección contra incendios, puede destinarse a tareas de control como de extinción. En la primera de ellas, el agua nebulizada estará destinada a espacios sin localizaciones específicas con riesgo de fuego. Algunos de estos emplazamientos podrían ser: sala de ordenadores, archivos, centros de telecomunicaciones, etc.
Para tareas de extinción, este sistema de protección contra incendios se destina a lugares en las que existen unas características de fuego específicas. Estos espacios podrían ser, por ejemplo: cabinas de pinturas, cocinas industriales, escaleras mecánicas, motores diesel y alternadores, etc.
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